lunes, 30 de junio de 2008
domingo, 29 de junio de 2008
Clientes y clientas

Pero en fin. Pese a todo eso, les decía, procuraré que el género neutro, pese a que ha funcionado tranquilamente toda la puta vida, quede abolido a partir de ahora de mi panoplia expresiva. En el futuro, cualquier neutro usual al que recurra, irá acompañado, para evitar confusiones, de su correspondiente femenino tal vez deba decir de su correspondiente femenina. Escribiré así, en adelante, jóvenes y jóvenas, responsables y responsablas, votantes y votantas, enriqueciendo y normalizando la lengua española con perlas la de jueza me parece hasta ahora la más refinada del elenco como tenienta, sargenta, caba, cantanta, imbécila. Mi única duda es si al escribir jóvenes, responsables y votantes no estaré incurriendo precisamente en el extremo opuesto, desdeñando la personalidad masculina de los antedichos: y tal vez fuera mejor, en ese caso, que escribiese jóvenos, responsablos y votantos. Así cada cual tendría lo suyo, y no habría dudas al respecto: electricisto, dentísto, ebanisto, cidisto, diento, gilipollo. Pero, llegados a ese extremo, la cosa iba a complicarse, porque hay un tercer sexo: los homosexuales existen y tienen sus derechos. ¿Cómo dejarlos fuera? Además, unos homosexuales asumen peculiaridades de un tipo, y otros de otro. Los hay que prefieren llamarse Maripepa y los hay que prefieren llamarse Paco. Y las hay. En su caso habría que matizar. Así que lo ideal, llevando la cosa hasta sus últimas y honradas consecuencias, sería decir, por ejemplo: «Queridos, queridas y querides compañeros, compañeras y compañeres, heterosexuales y homosexuales, clérigos, seglares y pensionistas de la tercera edad: gobernamos gracias al apoyo de los votantos, votantas y votantes españoles, españo/os y españolas, que son responsablos, responsablas y responsables de que los ciudadanos, ciudadanes y ciudadanas puedan encarar el futuro, etcétera». Será un poco farragoso y gastaremos más saliva y tinta, pero todo el mundo estará contento. Creo.
Ese bobo del móvil

Estoy hasta la glotis de tropezarme contigo y con tu teléfono. Te lo juro, chaval. O chavala. El otro día te vi por la calle, y al principio creí que estabas majareta, imagínate, un fulano que camina hablando solo en voz muy alta y gesticulando furioso con una mano arriba y abajo. Ése está para los tigres, pensé. Hasta que vi el móvil que llevaba pegado a la oreja, y al pasar por tu lado me enteré, con pelos y señales, de que las piezas de PVC no han llegado esta semana, como tú esperabas, y que el gestor de ciudad Real es un indeseable. A mí, francamente, el PVC y el gestor de Ciudad Real me importan un carajo; pero conseguiste que, a mis propias preocupaciones, sumara las tuyas. Vaya a cuenta de la solidaridad, me dije. Ningún hombre es una isla. Y seguí camino.
A la media hora te encontré de nuevo en un café. Lo mismo no eras tú, pero te juro que tenías la misma cara de bobo mientras le gritabas al móvil. Yo había comprado un libro maravilloso, un libro viejo que hablaba de costas lejanas y antiguos navegantes, e intentaba leer algunas páginas y sumergirme en su encanto. Pero ahí estabas tú, en la mesa contigua, para tenerme al corriente de que te hallabas en Madrid y en un café cosa que por otra parte yo sabía perfectamente, porque te estaba viendo y de que no volverías a Zaragoza hasta el martes por la noche. Por qué por la noche y no por la mañana, me dije, interrogando inútilmente a Alfonso el cerillero, que se encogía de hombros como diciendo: a mí que me registren. Tal vez tiene motivos poderosos o inconfesables, deduje tras cavilar un rato sobre el asunto: una amante, un desfalco, un escaño en el Parlamento. Al fin despejaste la incógnita diciéndole a quien fuera que Ordóñez llegaba de La Coruña a mediodía, y eso me tranquilizó bastante. Estaba claro, tratándose de Ordóñez. Entonces decidí cambiar de mesa.
Al día siguiente estabas en el aeropuerto. Lo sé porque yo era el que se encontraba detrás en la cola de embarque, cuando le decías a tu hijo que la motosierra estaba estropeada. No sé para qué diablos quería tu hijo, a su edad, usa la motosierra; pero durante un rato obtuve de ti una detallada relación del uso de la motosierra y de su aceite lubricante. Me volví un experto en la maldita motosierra, en cipreses y arizónicas. El regreso lo hice en tren a los dos días, y allí estabas tú, claro, un par de asientos más lejos. Te reconocí por la musiquilla del móvil, que es la de Bonanza. Sonó quince veces y te juro que nunca he odiado tanto a la familia Cartwright. Para la ocasión te habías travestido de ejecutiva madura, eficiente y agresiva; pero te reconocí en el acto cuando informabas a todo el vagón sobre pormenores diversos de tu vida profesional. Gritabas mucho, la verdad, tal vez para imponerte a las otras voces y musiquillas de tirurí tirurí a veces te multiplicas, cabroncete que pugnaban con la tuya a lo largo y ancho del vagón. Yo intentaba corregir las pruebas de una novela, y no podía concentrarme. Aquí hablabas del partido de fútbol del domingo, allá saludabas a la familia, acullá comentabas lo mal que le iba a Olivares en Nueva York. Me sentí rodeado, como checheno en Grozni. Horroroso. Tal vez por eso, cuando me levanté, fui a la plataforma del vagón, encendí el móvil que siempre llevo apagado e hice una llamada, procurando hablar bajito y con una mano cubriendo la voz sobre el auricular, la azafata del vagón me miró de un modo extraño, con sospecha. Si habla así pensaría, tan disimulado y clandestino, algo tiene que ocultar este hijoputa.
viernes, 27 de junio de 2008
Al vino

jueves, 26 de junio de 2008
Ministra de la Desigualdad

Bibiana/o Aido/a

Curriculum Bibiana Aído

Obtuvo acta de parlamentaria autonómica en las elecciones del 9M, a la que se vió obligada a renunciar, estrenando la cartera del nuevo Ministerio de Igualdad (que aun nadie sabe lo que es ni para qué sirve).
RECOMIENDO LEER "1984" novela de política-ficción escrita por George Orwell. En la novela el estado omnipresente obliga a cumplir las leyes y normas a los miembros del partido totalitario mediante el adoctrinamiento, la propaganda, el miedo y el castigo despiadado. La novela introdujo los conceptos del siempre presente y vigilante Gran Hermano, de la notoria habitación 101, de la ubicua policía del pensamiento y de la neolengua (como nuesta Bibiana), adaptación del inglés en la que se reduce y se transforma el léxico basándose en el principio de que lo que no está en la lengua, no puede ser pensado. La novela es una descripción analítica de los regímenes totalitarios con un final desolador. Los ministerios son:
- El Ministerio del Amor se ocupa de los castigos y la tortura.
- El Ministerio de la Paz se encarga de asuntos relacionados con la guerra y con hacer que ésta sea permanente.
- El Ministerio de la Abundancia, encargado de los asuntos relacionados con la economía y de conseguir que la gente viva siempre al borde de la subsistencia.
- El Ministerio de la Verdad, se dedica a reescribir la historia e inventar héroes, para que las predicciones del Gran Hermano coincidan con la realidad, por medio de la falsedad de dichas predicciones en la opinion publica.
No hace falta demasiado ingenio ni ser un lince para detectar paralelismos entre la sociedad actual y el mundo de "1984", practicamente estamos viviendo en la sociedad Orwelliana. El término Orwelliano se ha convertido en sinónimo de las sociedades u organizaciones que reproducen actitudes totalitarias y represoras como las representadas en la novela.
El 11 de febrero de 2003 fue nombrada delegada provincial de la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía en Cádiz, cargo que ocupó hasta julio de 2006, cuando fue designada directora de la Agencia Andaluza para el Desarrollo del Flamenco, dependiente de esa misma consejería (muy interesante).
martes, 24 de junio de 2008
Ministras de la Cuota Chiquito

No le falta un perejil. Sí, La Miembra es de las que ya no fabrican. Un modelo descatalogado, que hay que buscar en Cambalache o en Segunda Mano. Una mujer como las madres quieren para sus hijos. Esta va a poner caro el pescado del casorio. Cuando los hijos lleguen diciéndole a sus madres que se han echado novia, pero novia de casarse, les preguntarán:
-¿Y cómo es, hijo? ¿Es comprometida desde que tiene uso de razón, muy luchadora, muy trabajadora, autoexigente, sensible a los problemas sociales, honesta, buena persona?
-No sé, mamá: estudia Derecho y Económicas en el CEU, y le han dado una beca Erasmus para Holanda...
-Ah, pues esa chica no te conviene nada, hijo. Mira, tú tienes que tirarle los tejos a una de Cádiz que le dicen La Miembra, que gana un pastón, y que la he visto en una foto con la Princesa de Asturias y así con su trajecito de chaqueta como la que va a una boda de pueblo tiene una pinta de catetita honrada y decente que es lo que a ti te conviene, y no esas lagartonas que se van, fíjate tú, a Holanda, con la poca vergüenza que hay en Holanda...
El gran negocio en este momento de crisis sería comprar a La Miembra por lo que es y venderla por lo que ella dice que vale. Cuanto es lo ha contado José Aguilar en las gaditanas gacetas. Dice Aguilar: «Cuando Chaves estaba configurando su nuevo gobierno le pregunté a un prohombre socialista si Bibiana Aído, la joven directora de la Agencia Andaluza de Flamenco, iba a ser consejera de Cultura. «Aún es pronto, está muy verde, que madure donde está», respondió. Pues menos mal que estaba verde para ser consejera... Si llega a estar madura, ahora la vemos de excelentísima vicepresidenta del Gobierno, con Teresa Fernández de la Vega en los albañiles».
O sea, que los que saben del Gotha del PSOE aseguran que La Miembra está verde como el trigo verde del verde, verde, limón. Pasar en horas veinticuatro de becaria de una caja de ahorros a ministra de Igual Da Que Sea Ministra O No, es un carrerón. Pero un carrerón, y es donde yo quería llegar, lamentable. Por el que Chaves o por lo menos Arenas tenían que haber protestado. Por lo visto es consustancial con los gobiernos de ZP que siempre haya en ellos una andaluza que sea la risión de España entera. Antes lo fue Carmen Calvo y ahora, La Miembra. Dicen que La Miembra es la ministra 2.0. Todo muy Google, ahora que le han dado, qué vergüenza, el premio Príncipe de Asturias de Comunicación a un buscador, a una máquina herramienta (me pido que el próximo se lo den a la lavadora o a la minipímer). Sí, La Miembra es Carmen Calvo 2.0. Dice las mismas mamarrachadas que la Calvo, pero mejoradas. La Calvo hablaba de los anglicanismos; ésta, de fistro como anglicismo. La Calvo, de las frailas; ésta, de las miembras. Para La Calvo, El Rocío era la explosión de luz del Mediterráneo; para ésta, el teléfono es el medio de cambiar el rol (¿Royce?) del hombre en el por aquí te quiero ver. La Calvo era de Cabra. La Miembra, de Alcalá de los Gazules. Andaluzas. Y a eso es a lo que voy. Nos quejamos de que en las series de la tele, la chacha de la que se ríe la gente es siempre andaluza. Pues en los gobiernos de ZP, igual. La Fraila o La Miembra de la que se ríe España entera es siempre una andaluza elevada al máximo de su incapacidad. No por la cuota femenina del Gobierno, sino por la Cuota Chiquito de la Calzada. Para esto, mejor haz ministro directamente a Chiquito, Zapatero, pecador de la pradera, y no nos des más a los andaluces por el diodeno.
domingo, 22 de junio de 2008
Conservas

Félix Velasco
sábado, 21 de junio de 2008
La rebelión de las masas - 14

La rebelión de las masas - 13

La rebelión de las masas - 12

La rebelión de las masas - 11

miércoles, 18 de junio de 2008
lunes, 16 de junio de 2008
No culpes a nadie

Nunca te quejes de nadie, ni de nada,
porque fundamentalmente tú has hecho
lo que querías en tu vida.
Acepta la dificultad de edificarte a ti
mismo y el valor de empezar corrigiéndote.
El triunfo del verdadero hombre surge de
las cenizas de su error.
Nunca te quejes de tu soledad o de tu
suerte, enfréntala con valor y acéptala.
De una manera u otra es el resultado de
tus actos y prueba que tú siempre
No te amargues de tu propio fracaso ni
se lo cargues a otro, acéptate ahora o
seguirás justificándote como un niño.
Recuerda que cualquier momento es
bueno para comenzar y que ninguno
es tan terrible para claudicar.
No olvides que la causa de tu presente
es tu pasado así como la causa de tu
futuro será tu presente.
Aprende de los audaces, de los fuertes,
de quien no acepta situaciones, de quien
vivirá a pesar de todo, piensa menos en
tus problemas y más en tu trabajo y tus
problemas sin eliminarlos morirán.
Aprende a nacer desde el dolor y a ser
más grande que el más grande de los
obstáculos, mírate en el espejo de ti mismo
y serás libre y fuerte y dejarás de ser un
títere de las circunstancias porque tu
mismo eres tu destino.
Levántate y mira el sol por las mañanas
y respira la luz del amanecer.
Tú eres parte de la fuerza de tu vida,
ahora despiértate, lucha, camina, decídete
y triunfarás en la vida; nunca pienses en
la suerte, porque la suerte es:
domingo, 15 de junio de 2008
Sandwich

- Apoderarse de la famosa lápida "Mármol de Sandwich" durante su gira juvenil por Europa con inscripciones descifradas en 1743 por Taylor
- El archipiélago de las Islas Sandwich del Sur en el Océano Atlántico, de las que tomó posesión en nombre del rey Jorge III el célebre capitán Cook en 1775 (compuesto por las islas de Saunders, Montagu, Bristol y Southern Thule) en el Mar de Escocia, cuando Lord Sandwich era entonces primer Lord del Almirantazgo
- La ocurrencia culinaria del cocinero del conde, bautizado con su nombre.
El bigote y el mostacho

Los españoles no tuvieron bigote hasta el siglo XVI, hasta entonces tenían mostacho, que era mucho más grueso y poblado.
Estuvo de moda en los ejércitos de numerosas naciones, con gran variedad de estilos. En general, los hombres jóvenes y los de grados inferiores llevaban pequeños y menos elaborados bigotes; los oficiales de alta graduación y los veteranos, portaban espesos mostachos. En algunos países fue obligatorio, para los soldados, dejar crecer el bigote. El ejército británico, por ejemplo, prohibió el rasurado del labio superior, en todos los grados, desde el siglo XIX hasta que el reglamento fue abolido mediante una Orden del ejército de 6 de octubre de 1916.
En el siglo XIX, los aristócratas, los magistrados y los encargados de impartir la ley y ejercer la autoridad tenían bigote y barba.
miércoles, 11 de junio de 2008
La "miembra": ¿Hay vida inteligente en el Gobierno?

Miembros, miembras y chiquilicuatradas

Nada de "miembros y miembras". Todos, mujeres y hombres, somos, simplemente, miembros. Gregorio Salvador, miembro de la Real Academia de la Lengua (RAE), se llevó las manos a la cabeza al escuchar cómo el pasado lunes, durante su comparecencia en el Congreso, la ministra de Igualdad hablaba de "miembros y miembras". Bibiana Aído se reafirmó ayer en su uso de la expresión y, además, anunció que no descartaba "que se pudiera incluir" el novedoso término en el diccionario de la RAE. Salvador, tras aconsejar a la ministra que se dejara de "bromas de mal gusto", respondió que "tal inclusión era imposible."
¡Libertad para hablar en español!

En su opinión, imponer la enseñanza de las lenguas cooficiales a los que no las tienen como idioma materno sería "volver a los tiempos pasados y a la situación que tanto se criticó del franquismo, con mucha razón, que era la enseñanza exclusiva en la lengua común". "Pero si para enmendar ese abuso de la dictadura lo que se hace es lo contrario, se está haciendo algo mucho más lamentable porque, en definitiva, las lenguas no son iguales; sirven fundamentalmente para comunicarse, y no es lo mismo una que permite hacerlo con tres millones de personas que otra que sirve para hablar con cuatrocientos millones", insistió Salvador. Pérez-Reverte comparte plenamente estas ideas, así como otra de las que defiende Salvador en su libro: que el español "no es una lengua nacionalista, porque no es una seña de identidad para nadie; es plurinacional y multilingüe". Y es, "a pesar de lo que dicen los estúpidos y los manipuladores, una lengua generosa, abierta, donde cabe todo el mundo y donde cualquier variante documentada con rigor es incorporada", aseguró el autor de El capitán Alatriste.
jueves, 5 de junio de 2008
Con el correr de los años...

He aprendido… Que una persona diciéndome, “Me alegraste el día”… alegra mi día.
He aprendido… Que ser niño es más importante, que estar en lo correcto.
He aprendido… Que siempre puedo rezar por alguien, cuando no tengo otro modo de ayudarlo.
He aprendido… Que no importa que tan serio requiera la vida que seas, todos necesitamos un amigo con el que podamos reír a carcajadas.
He aprendido… Que algunas veces, todo lo que una persona necesita, es una mano que sostener y un corazón que entender.
He aprendido… Que la vida es como una espiral, mientras más se acerca al final, más rápido camina.
He aprendido… Que debemos estar felices porque Dios no nos da todo lo que pedimos.
He aprendido… Que el dinero no compra la clase.
He aprendido… Que esas pequeñas cosas que pasan diariamente, son las que hacen la vida espectacular.
He aprendido… Que debajo de el duro escudo de las personas, hay alguien que quiere ser apreciado y amado.
He aprendido… Que Dios no hizo todo en un solo día… ¿Qué me hace pensar que yo puedo?
He aprendido… Que ignorar lo hechos… nunca los cambia.
He aprendido… Que es el amor, no el tiempo el que cura todas las heridas.
He aprendido… Que cada persona a la que conoces, merece ser obsequiada con una sonrisa.
He aprendido… Que nadie es perfecto… hasta que te enamoras de alguien.
He aprendido… Que las oportunidades nunca se pierden, alguien mas tomara aquella que tu dejaste pasar.
He aprendido… Que uno debe decir palabras suaves y tiernas, porque mas adelante puedo tener que tragarme las ofensas.
He aprendido… Que una sonrisa, es la manera más barata, de tener mejor aspecto.
He aprendido… Que no puedo elegir como me siento, pero puedo elegir que hacer con respecto a eso.
He aprendido… Que todos quieren estar en la cima de la montaña, sin darse cuenta que toda la felicidad y experiencias agradables, suceden mientras se escala hacia ella.
martes, 3 de junio de 2008
Vive

Ya perdoné errores casi imperdonables.
Traté de sustituir personas insustituibles, de olvidar personas inolvidables.